viernes, noviembre 21, 2008

Navegar

Nómada de los caminos perdidos
olvidados

perdido en el tiempo de no tener idea
de la fecha o de las horas

parte de la selva sin descuidar
las risas y las historias antiguas

probar alimento tomado de la mano
de tanta hambre y de poca sed

ni tu dios puede conmigo
los espíritus me rodean
me cuidan y vigilan la tierra
los arboles y el humo
que me envuelve trasnochado
vegetando y siendo parte
de la naturaleza

me buscare otra vez
tendido en la sombra
de las almas puras
llenas de rostros
perdidos y sorprendidos
hombro con hombro

cazadores, compartiendo
el fruto de la jungla
del desierto, del mar
con veredas inciertas
pobladas de hojas amarillas
fogatas eternas
avivadas por lo que la naturaleza
antes de pudrir nos calienta

Los nómadas de la selva
profunda, salvaje, viva, cambiante
no son salvajes
no mas que los que en nombre de su cristo
derriban un árbol para escribir libros
y creen que su dios es el creador
de todo lo que ellos destruyen

Esta noche la ciudad es mi selva
sigo siendo nómada
en tierras que tienen dueño
que ni mis pies descalzos
podrán andar por lo privado

Esta noche la libertad
esta cantando
como el viento acariciando
besando las hojas de los cedros
de las palmas

Esta noche la libertad
me roba el sueño
pero no mis anhelos
me reencuentra
con lo salvaje y sublime de los mas hermoso de la vida, que es vivirla.

Germán Diego.
Neza, México
21/Nov./2008.

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