La tarde mágica
y la vuelta de hoja
al vidrio traslucido
poseído por el sol
por las estrellas
la tarde imposible
magia y momentos
recordé quien vive
dentro de la cueva
a oscuras intentado
dar luz a la calle
sin duda volveré a lo básico
comprare una libreta y una pluma, ya no
me hicieron un buen regalo hoy y venia una tinta negra
junto con un reloj y una cachucha
extraño lo sencillo
colorido a centeno loco
mañana sera domingo
y vuelo de nuevo solo
tal vez mas solo que antes
y extraño mucho el momento
vamonos de viaje
a lo corto
a recorrer banderas y calles
a sentir de nuevo ceremonias
y rictus de iniciación de otra muchedumbre
hambrienta y ansiosa de ser notados
paisajista de mi propio ego
calamidad enmascarada del velo prohibido de la sal
no se me da, Y ya debería de convivir con la costumbre
con la negación a mi propio deseo
debería de darme orgullo
y se siente el vacío en mi respiración
en la mera garganta donde el nudo se aprieta
a cada tirón de ansiedad, de sueños
otra tarde mágica al lado de nadie
solo, quieto y con la carga bajo los días
la mas tremenda tonada del corazón
tambores precolombinos
retumban en la sangre hirviente
del único deseo de encontrar
la felicidad a manos del resto de mi vida.
y la vuelta de hoja
al vidrio traslucido
poseído por el sol
por las estrellas
la tarde imposible
magia y momentos
recordé quien vive
dentro de la cueva
a oscuras intentado
dar luz a la calle
sin duda volveré a lo básico
comprare una libreta y una pluma, ya no
me hicieron un buen regalo hoy y venia una tinta negra
junto con un reloj y una cachucha
extraño lo sencillo
colorido a centeno loco
mañana sera domingo
y vuelo de nuevo solo
tal vez mas solo que antes
y extraño mucho el momento
vamonos de viaje
a lo corto
a recorrer banderas y calles
a sentir de nuevo ceremonias
y rictus de iniciación de otra muchedumbre
hambrienta y ansiosa de ser notados
paisajista de mi propio ego
calamidad enmascarada del velo prohibido de la sal
no se me da, Y ya debería de convivir con la costumbre
con la negación a mi propio deseo
debería de darme orgullo
y se siente el vacío en mi respiración
en la mera garganta donde el nudo se aprieta
a cada tirón de ansiedad, de sueños
otra tarde mágica al lado de nadie
solo, quieto y con la carga bajo los días
la mas tremenda tonada del corazón
tambores precolombinos
retumban en la sangre hirviente
del único deseo de encontrar
la felicidad a manos del resto de mi vida.
Germán Diego.
13 - Diciembre - 2008.
Neza, México.
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